Hace siete años, el Guadalajara se proclamó campeón por última vez del Liga MX de la mano de Matías Almeyda. En una emocionante final ante los Tigres de Ricardo Ferretti, la final de vuelta en el Estadio Akron lo tuvo todo. Grandes goles, empujones y por supuesto, polémicas arbitrales.

Uno de ellos ocurrió cerca del final del partido, en un momento en el que Tigres podría igualar el marcador global si el árbitro de ese encuentro, luis enrique santandercobró un penal a favor de los regiomontanos.

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En el minuto 93, Ismael Sosa Entró al área rojiblanca con ventaja sobre sus rivales y en un intento de ganar posición extendió el balón de tal manera que quedó de cara al defensor rojiblanco. Jair Pereiraquien en su intento de despejar, impactó al atacante argentino.

La jugada continuó y el balón acabó en los pies de Damián Álvarez, quien estaba en fuera de juego y por eso no se le cobró la infracción; sin embargo, La final estuvo marcada por esta polémica eso podría cambiar el curso del juego.

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“¿Y si lo toco? Lo rompí, hermano”. declaró Pereira en un programa de radio.

“I si le doy una puta patadaSi te lo dijera no sería un mentiroso. “Le pegué riquisimo”, agregó, además de mencionar que Santander informó a los jugadores en ese momento que no cobró el penalti por fuera de juego.

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